Cuando te sientas derrotado/a porque tus proyectos no han salido como querías...
Ten En Cuenta Esto
Woody Allen –escritor, productor y director ganador de premios de la Academia- no aprobó Producción Cinematográfica en la Universidad de Nueva York y en el City Collage de Nueva York. También fue reprobado en Inglés en la Universidad de Nueva York.
Luise May Alcott, la autora de Mujercitas, era impulsada por su familia a conseguir trabajo como mucama o costurera.
Beethoven tocaba mal el violín y prefería ejecutar sus propias composiciones en vez de mejorar su técnica.
Su profesor consideraba que no tenía futuro como compositor.
El director de un diario despidió a Walt Disney por falta de ideas. Walt Disney además quebró varias veces antes de construir Disneylandia.
Albert Einstein no habló hasta los cuatro años y no leyó hasta los siete. Su maestra lo describió como “mentalmente lento, insociable y encerrado siempre en sueños tontos”. Lo expulsaron y no lo dejaron ingresar en la Escuela Politécnica de Zurich.
Louis Pasteur fue un alumno mediocre y ocupaba el puesto número quince sobre veintidós.
Isaac Newton no rindió demasiado en el colegio.
Henry Ford fracasó cinco veces antes de lograr el éxito.
Winston Churchill no aprobó sexto grado. Llegó a Primer
Ministro recién a los sesenta y dos años y luego de una vida de derrotas y reveses. Hizo sus mayores contribuciones cuando era un “hombre mayor”.
En 1959, un ejecutivo de la Universal Pictures echó a Clint Eastwood y a Burt Reynolds en la misma reunión, con las siguientes palabras, a Burt le dijo: “No tiene talento”. A Clint: “Tiene una papa en los dientes, su nuez de Adán sobresale mucho y habla con demasiada lentitud”. Burt y Clint, como es ya sabido siguieron adelante hasta convertirse en grandes estrellas de la industria cinematográfica.
En 1962, cuatro nerviosos músicos jóvenes hicieron su primera audición discográfica para los ejecutivos de la empresa Decca Recording. Los ejecutivos no quedaron para nada impresionados. Al rechazar a este grupo de rock británico llamado Los Beatles, uno de los ejecutivos dijo: “No nos gusta cómo suenan. Los grupos de guitarra ya se están agotando”.
Cuando Alexander Graham Bell inventó el mayor aparato de comunicación, el teléfono en 1876, no lo estrenó con llamadas de potenciales patrocinadores. Después de hacer una llamada demostrativa, el presidente Rutherford Hayes dijo: “Que invento sorprendente, pero ¿a quién se le va a ocurrir tener uno?
Thomas Edison fue probablemente el mayor inventor en la historia de Norte América.
Cuando inventó la lamparita eléctrica, realizó mas de dos mil experimentos hasta lograr que funcionara. Un periodista joven le preguntó que había sentido con tantos fracasos. El respondió: “No fracasé ni una sola vez. Inventé la bombita de Luz. Sólo fue un proceso de dos mil pasos”.
EJEMPLO DE ABRAHAM LINCOLN
Uno de los grandes ejemplos de persistencia es Abraham Lincoln.
Para tener en cuenta a la hora de darse por vencido.
Nacido en la pobreza, Lincoln enfrento la derrota a lo largo de toda su vida.
Perdió ocho elecciones, dos veces fracasó en los negocios y sufrió un colapso nervioso.
Podría haberse dado por vencido muchas veces, pero no lo hizo y porque no lo hizo, se convirtió en uno de los mas grandes presidentes de Estados Unidos.
Fue un luchador, un campeón, y nunca cejo en su empeño.
El siguiente es un resumen del camino de Abraham Lincoln hasta la Casa Blanca:
1816 – Desalojan a su familia de su casa. Tiene que trabajar para mantenerla.
1818 – Muere su madre.
1831 – Quiebra un negocio.
1832 – Se presenta para la legislatura estatal y pierde.
1832 – Pierde su trabajo. Quiere entrar en la facultad de derecho pero no puede.
1833 – Pide dinero prestado a un amigo para iniciar un negocio y al final del año quiebra. Pasa casi diecisiete años de su vida pagando su deuda.
1834 – Vuelve a presentarse para la legislatura estatal, esta vez gana.
1835 – Se compromete para casarse, su prometida muere y queda destrozado.
1836 – Tiene un colapso nervioso total y está en cama durante seis meses.
1838 – Trata de ser portavoz de la legislatura estatal, es derrotado.
1840 – Trata de ser electo. Es derrotado.
1843 – Se presenta nuevamente para el Congreso, gana, va Washington y se desempeña bien.
1848 – Se presenta para la reelección en el Congreso. Pierde
1849 – Trata de ocupar el cargo de jefe de catastro en su estado natal. Es derrotado.
1854 – Se presenta para el Senado de los Estados Unidos. Pierde.
1856 – Intenta obtener la nominación para vicepresidente en la convención nacional de su partido. Obtiene menos de cien botos.
1858 – Se presenta de nuevo para el Senado norteamericano y vuelve a perder.
1860 – Es elegido presidente de los Estados Unidos.
El camino era difícil y resbaladizo. Se me resbalaba un pie y sacaba al otro del camino, pero me recuperaba y me decía a mí mismo: “Es un tropezón y no una caída”.
Abraham Lincoln.
Todas estas historias de la vida real, las he citado, aunque tal vez tu ya las conocieras o conozcas otras similares o mejores, con la intención de demostrar que todos tenemos grandes talentos y cualidades en nuestro interior, solo tenemos que permitir que afloren, e impulsar nuestros sueños con acciones, para no tener que arrepentirnos el día de mañana, por hoy no haber hecho lo que sabíamos que podíamos hacer.
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