Elección de los términos clave
Es lo primero y parece obvio... Pero no lo es: no lo es por varios motivos: en primer lugar porque como ya hemos visto, en la mayoría de los buscadores no es lo mismo una palabra con acento que la misma sin acento
("enfermeria" que "enfermería" por ejemplo), por lo que de optimizar para una (normalmente la que no tiene acentos) estaríamos perdiendo los que buscan la otra. Claro que no siempre podemos elegir y tendremos que forzar en muchos casos una "doble optimización" para la palabra con y sin acento.
Por otro lado, conseguir resultados óptimos para una única palabra nos sitúa en la competición más dura. En general será más fácil obtener un buen posicionamiento cuanto más específica sea la búsqueda, es decir, posicionar www.guiadeenfermeria.com para "enfermeria" será siempre más difícil que para "enfermeria clinica".
Lo recomendable es jugar con un término principal para el que optimizamos el código consciente y rigurosamente y un término secundario o dos para el que dejaremos pistas en el código pero sin forzar la programación.
Pero, ¿cómo elegimos el término principal?. Tres deberían ser los criterios:
- el término más buscado relacionado con el tema principal de nuestra página
- el término por el que los usuarios que ya nos conocen buscarían nuestra página
- el término más atractivo para el potencial público de nuestra página
En algunos casos es fácil: por ejemplo en www.piensaenpalm.com los dos primeros criterios nos llevaban a luchar por el competidísimo término "palm", mientras que el tercero por una serie de parejas tipo "programas palm", "noticias palm" e incluso "medicina palm"
Optamos por una estrategia centrada en la palabra "palm" con tratamientos específicos en algunas páginas para las parejas. La elección se demostró acertada pues tanto en Google como en Altavista (los buscadores objetivo de aquel posicionamiento) piensaenpalm.com aparece hoy entre los 5 primeros resultados de búsqueda para más de una docena de parejas tipo "* palm". Y la segunda para la palabra "palm", por encima incluso de la web oficial en español del fabricante Palm Inc.
Sin embargo no necesariamente los tres criterios deben apuntar hacia el mismo lugar.
Tomemos por ejemplo www.saludytecnologia.com, un sitio también dedicado a PDAs (ordenadores de bolsillo) en su aplicación para profesionales sanitarios.
El primer criterio nos orientaría a las palabras "PDA" o "Palm". El segundohacia algo parecido a "tecnologia salud" o "tecnologia medicina". El tercero según nos informan los logs sería claramente "salud" (ya que aparece en el cuarenta y tantos entre los resultados de la búsqueda "Salud" en Google y sin embargo esta es la búsqueda que más visitantes aporta desde buscadores).
¿Qué hacer? Dado el grado de especialización de la web a posicionar, optamos desde un principio a una estrategia centrada en grupos de dos palabras y sobre todo en "palm salud" y "pda salud" criterios en los que hoy ocupa la primera posición en el listado de resultados de Google.
Un problema frecuente es el derivado del desconocimiento sobre el número de peticiones que como media recibe cada término de búsqueda. Cuando posicionamos www.guiadeenfermeria.com aún Google distinguía (como siguen haciendo Altavista y otros muchos buscadores) entre la palabra con tilde y sin tilde.
Decidimos invertir 100 dólares en un anuncio clasificado de Adwords en Google... para descubrir con sorpresa que por cada vez que una persona buscaba "enfermería", había diez que buscaban "enfermeria". También descubrimos que la palabra "enfermera" y su plural "enfermeras" era buscado abrumadoramente no por profesionales (nuestro público objetivo) sino por amantes de páginas para adultos... lo que nos lo eliminó como posible término secundario. Optamos por un doble posicionamiento en ese caso: "enfermeria" y "enfermería" (para los buscadores que las consideraban palabras distintas).
Hoy www.guiadeenfermeria.com ocupa el primer lugar en Google y el segundo y tercero respectivamente en Altavista para dichos criterios.
Hay un viejo truco relacionado: aprovecharse de los errores comunes de escritura de los internautas o de las diferencias entre idiomas. Por ejemplo imaginemos que hemos hecho una página sobre un programa de televisión llamado "Business". La mayoría de los usuarios españoles difícilmente deletrearían correctamente la palabra "business", muchos pondrían cosas como "bussiness" o "busines". En los buscadores que no cuentan la popularidad podría ser útil hacer réplicas de la página a posicionar con la expresión mal escrita y un enlace a la versión "correcta".